La iniciativa busca desalentar los plásticos de un solo uso y promover alternativas sustentables que sustituyan envoltorios innecesarios en alimentos.
La Municipalidad de Rosario lanza una campaña para concientizar sobre la ordenanza N° 10.216/21 por la cual se «prohíbe el uso de envoltorios plásticos –film y bandejas plásticas– en frutas, verduras y hortalizas cuya cáscara actúe como protección natural, en comercios y supermercados».
Bajo la consigna «Menos plástico, más conciencia», el Municipio convoca a verdulerías, supermercados e hipermercados de la ciudad a sumarse a la iniciativa que busca la eliminación progresiva de envoltorios plásticos innecesarios en frutas, verduras y hortalizas cuya cáscara cumple funciones de protección natural y traslado.
En este marco, equipos de la Dirección de Gestión Integral de Residuos dependiente de la secretaría de Ambiente y Espacio Público recorren verdulerías del centro para ponerlas en conocimiento de la ordenanza y avanzar con la eliminación progresiva de bandejas descartables, papel film y otros envoltorios plásticos de uso frecuente. Una vez completado el esquema de visitas a verdulerias, será el turno de hipermercados y mercados de concentración.
Los establecimientos y locales exhibirán afiches y adhesivos identificativos con la leyenda de la campaña: «Menos plástico, más conciencia», como sello distintivo de cumplimiento de la normativa y compromiso con el cuidado del ambiente. “Menos plástico más conciencia llama a los rosarinos y las rosarinas a reflexionar y actuar en consecuencia sobre el consumo excesivo de plásticos, un material de uso frecuente en productos de descarte rápido o casi instantáneo y de muy corto ciclo de vida”, explicó la subsecretaria de Ambiente, María Cantore y agregó: “Debemos repensar nuestros hábitos de consumo, abandonar la cultura del descarte, fomentar el consumo responsable y avanzar definitivamente hacia un modelo circular de gestión residuos” .
“La contaminación que genera el exceso de plásticos de un solo uso requiere que actuemos de manera urgente, a partir del involucramiento, el esfuerzo y el compromiso de todos. Es menester pensar en alternativas sustentables como la compra a granel y la reutilización de recipientes. La gran cantidad de plástico que descartamos tiene un impacto ambiental negativo: tardan cientos de años en descomponerse, su fabricación demanda grandes cantidades de energía, son desechadas sin control y terminan contaminando nuestro Río Paraná», remarcó la funcionaria municipal.
Cabe destacar que la iniciativa se suma a las acciones que impulsa el Ejecutivo local para la eliminación progresiva de plásticos de un solo uso por tratarse de productos pensados y fabricados para ser desechados después de su primer uso, y que en la mayoría de los casos, no se pueden reutilizar ni reciclar.
Así, esta campaña que impulsa el Ejecutivo local a través de la secretaría de Ambiente y Espacio Público, además de desalentar el uso de envoltorios plásticos, también incluye acciones de concientización sobre el uso de sorbetes descartables, vasos plásticos y cucharas en heladerías y la promoción de alternativas sustentables como la compra a granel y el uso de recipientes con cierres herméticos. Estas iniciativas apuntan a lograr una reducción significativa de los residuos urbanos, uno de los ejes fundamentales del Plan Local de Acción Climática Rosario 2030.
Actualmente se encuentra en marcha la campaña «Sin Bolsita por favor», iniciativa para disminuir el uso y eliminar progresivamente las bolsas plásticas en farmacias de la ciudad.
Datos sobre el plástico
Los plásticos son un derivado del petróleo, y su proceso de producción contribuye al calentamiento global. Tardan más de 150 años en desintegrarse, ocasionando un gran trastorno al ecosistema.
Según cifras oficiales, 13 millones de toneladas de plástico terminan en cursos de agua cada año, poniendo en riesgo los ecosistemas. Estos residuos no pueden ser asimilados por la naturaleza, y sólo un porcentaje muy bajo se ha reciclado. Los plásticos, principal material encontrado en el río, son hoy objeto de debate global, al igual que el modelo de producción y consumo que lleva a comprar y descartar a un ritmo cada vez más acelerado.
En lo que respecta a bolsas de plástico, se calcula que cada persona usa seis bolsas por semana en el mundo, 24 al mes, 288 al año, y unas 22.176 durante una vida promedio. Cada año, en el mundo, se utilizan entre 500 millones y un trillón de estos productos.