Vinieron desde  lejos, andá a saber desde dónde, eran una maroma de tipos mucho más que harapientos, andrajosos diría, que entre todos juntos formaban una masa compacta e informe, olorosa, eso es cierto, y no tan estética a la luz de los ojos, a menos que lo que abunde fuera, y en este caso lo era, no había ninguna duda, la estética de la máxima fealdad….

  “¡¡Queremos comida para nuestros hijos!!”; bramó uno, ni tan viejo ni tan descangayado como muchos otros que estaban en el grupo, “¡¡Necesitamos trabajar!!”, agregó otro, también a los gritos, vociferando con bronca…

“¡No hay!!” “¡Ni trabajo ni comida!!”, bramó, esta vez, el capataz de la fábrica…

 Es mayo de  2020. Tras llovido, mojado. En pura cuarentena por el Covit 19. No es “Sin pan y sin trabajo”, la pintura de Ernesto de la Cárcova, realizada en 1894 y expuesta en forma permanente en el Museo Nacional de Bellas Artes; tampoco “Desocupados” ni “Manifestación” de Antonio Berni, hechas en 1934. Es aquí y ahora, en plena pandemia por coronavirus en mayo de 2020.

¿Sobreviviremos? ¿Al virus, a los buitres carroñeros que se esmeran en destripar lo poco que nos queda de la República Argentina, esa que Moreno, otro Mariano, imaginó como libre, soberana, próspera, con industria propia, educación propia, sin desclasados ni marginales, con todos  incluidos, los indios, los negros, los mulatos, los mestizos, con los mismos derechos para todos y todas, aún a costa de la expropiación de los bienes a los más ricos y acaudalados, aquella que los miembros de la Logia Lautaro imaginaron como un estado independiente y libre?

El Alberto la timonea como los mejores. Pero los azotes de los vientos son diversos: la deuda externa y la deuda interna impagables, desde mucho antes que la cuarentena empiece, empresas que se van a pique, sobre todo las pymes, incluso desde antes del Covit 19, los oligarcas de siempre imponiendo condiciones y marcando la agenda, “¿dónde hay un mango, viejo Gómez?, los han limpiao con piedra pómez”, es, a esta altura, mucho más que una canción. Francisco Canaro escribió esa letra en 1933, en plena crisis global de la economía mundial, lo que se llamó, la Crisis del ’30. Bueno, esto va a ser mucho peor….

    Adhiero a la visión del Pepe (Mujica, expresidente uruguayo) de que esto va a ser para peor a nivel mundial. A nivel autóctono si ya Mauricio nos había dejado con el c… al norte, hablando en plata, perdón por la expresión tan poética y erudita, el coronavirus nos terminó de asesinar….

     La Argentina, de todos modos, está en crisis desde que tengo uso de memoria y desde que nací. Siempre salimos. De una forma o de otra. Nos adaptamos. Eso tenemos en común los latinoamericanos: el cuero duro, la esperanza cierta, la carencia como estilo de vida, la certeza absoluta de creer que “los malos tiempos pasarán”.

¿Pasarán? Siempre todas las crisis nos parecen la última, la imposible de vencer. Es el pánico del momento, lo inaudito del momento, como cuando nos dijeron “El que depositó dólares sacará dólares” y sacamos chauchas y palitos en míseros pesos argentinos, esto de que el Paraná se está secando (y parece que sí, che, es cosa de Mandinga, ¿de Mandinga o de los empresarios sojeros que talan todo lo que pueden, incluida la Amazonía completa con el aval del Soberbio (dígase por Bolsonaro) y del innombrable (esta vez no es ni el Carlos ni el Mauricio sino el Donald, no el de Disney sino el otro), de que nos quedamos sin colectivos (parece que mueren che, tienen certificado de extremaunción, habrá que pedalear de lo lindo, el tema es los que no pueden pedalear ni caminar ni tampoco pagar taxis), y, que de un tiempo a esta parte, todos seremos indigentes (algo aberrante para la clase media argentina).

    Los ricos siguen teniendo la pelota y la sacan a la cancha cuando quieren, a pesar de que el Alberto la gambetea como puede pero la certeza del gol, al menos hasta ahora, sigue siendo para los oligarcas de siempre.
    ¿Veremos la luz al final del túnel? ¿Seremos mejores o peores? ¿Volveremos al patrioterismo barato de cuando invadimos Malvinas o empezaremos a pensar, otra vez, después de tantos y tantos años, en una Patria independiente, ancha, grande, justa y soberana, y con los mismos derechos para todos y todas???

marianamiranda66@gmail.com