Analizaron la nueva normativa propuesta por el Departamento Ejecutivo para dicho sector de la ciudad. La comisión continuará la reunión el próximo miércoles.

En la sala de la Memoria del Anexo “Alfredo Palacios” se realizó esta mañana, lunes 14 de noviembre, la habitual reunión semanal de la comisión de Planeamiento presidida por su titular, Nadia Amalevi, de Arriba Rosario, de la que participaron vecinos de los barrios Fisherton, Portal de Aldea Abierta, San Eduardo y Hostal del Sol, al igual que la secretaria de Planeamiento, Agustina González Cid, y el subsecretario del área, Gervasio Solari.

En la ocasión los vecinos de las diferentes zonas expresaron sus opiniones respecto al mensaje del Departamento Ejecutivo en tratamiento que modifica las normativas urbanísticas para dicha zona; en tanto la secretaria de Planeamiento explicó las mismas y contestó inquietudes de vecinos y ediles.

Inició las intervenciones una vecino de San Eduardo, quien preguntó sobre el tema corredores y áreas de tejido y usos y sostuvo que “hay una parte ya muy consolidada” para precisar que “entre Malabia y Aviador Gatti está consolidada”, mientras que sí consignó que hay espacios libres “frente al aeropuerto”.

Luego intervinieron Paola Gallo y Florencia Casiello, del casco histórico de Fisherton, quienes reclamaron se mantenga la actual fisonomía de la zona, aludieron respecto a las calles que “son angostas” y expresaron su oposición a “cualquier modificación a lo que sea residencial”.

Por su parte otro de los vecinos consignó en el sector “no  hay energía eléctrica, no hay cloacas, no hay servicios” y estimó que “la normativa debería ir acompañada de la infraestructura”.

Enrique, otro residente en la zona, dijo que “cuando compré el lote hace 15 años lo hice sabiendo que no tenía servicios, por eso compre un grupo electrógeno, pero justamente mi elección fue por el espacio verde”, que pidió se mantenga.

Otro vecino marcó que en la zona puede llegar a haber en una casa 4 autos, para reiterar críticas a la densificación del sector.

En su primera intervención la secretaria de Planeamiento, González Cid, indicó que con la normativa propuesta “se están bajando las alturas” y marcó que “nos interesa proteger el casco histórico”.

Planteó a su turno otro de los residentes en el lugar que “el consenso es cero” para modificar la normativa” e insistió en que “no está la infraestructura”.

Una vecina del Portal Aldea Abierto sostuvo que “se tiene que aprobar la nueva ordenanza para evitar lo que se está diciendo”; requirió que “no haya más de dos unidades por lote” y también que “la calle Schweitzer no sea corredor” y en el mismo sentido respecto a la avenida Real.

En otra intervención una vecina pidió que “esta ordenanza se apruebe, con la actual ya nos hubieran destrozado”.

Apuntó otra habitante del área que “en Brassey entre Tarragona y Sánchez de Loria se vendió una casa muy grande y sabíamos el destino que iba a tener. Pocos meses después se habilitó un geriátrico” y a ello sumaron otras actividades como un centro de kinesiología y una clínica.

Continuó que la actual normativa “claramente tiene muchos grises. Los emprendimientos no deberían alterar el casco histórico”, para hacer referencia a la existencias de “casas con verde, con árboles. Hasta dónde van a modificar la historia del barrio”.

Planteó un vecino lo relativo a la instalación “de un food-park, donde estaba previsto como estacionamiento de apoyo para oficinas. Se hizo otra cosa, no se respeto” lo propuesto originalmente.

De González Cid

En su intervención la arquitecta González Cid resaltó que “es enriquecedor que los vecinos hagan sus planteos”, para admitir que “se trabajó casi en secreto –en el proyecto- para que no detonara el barrio”, y agregó que “no aparecieran obras antes que el Concejo apruebe” la nueva normativa.

Remarcó que “si hoy piden un permiso para realizar planta baja y 3 pisos se lo tenemos que dar” y destacó que “siempre tuvimos el objetivo de proteger al barrio, respetar las características de barrio jardín”, al igual que “contemplar cambios que se han ido dando”.

Con el acompañamiento de un power-point, explicó para los vecinos las principales características de la normativa propuesta. Insistió en que “se baja la edificabilidad” y reiteró que al presente podrían hacerse unidades “de oficinas o para alojamientos temporarios” si alguien lo planteara.

Precisó que “se baja un piso en las áreas de tejido, donde hoy se podría hacer hasta 3 niveles” y recordó que se propician dos unidades por lote, una en lotes de 500 metros sin cloacas y dos, en 250 metros con cloacas.

Indicó que se propone más densidad en los corredores, y respecto a la avenida Jorge Newbery, se plantean planta baja y cinco pisos, con deslindes, aludió también a “veredas verdes, veredas jardín”.

Ante la consulta de un vecino, respondió la secretaria de Planeamiento que actualmente en el área histórico, la construcción “se puede hacer sin límites”.

Al intervenir la concejala María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular, indica que varios concejales plantearon modificaciones a la propuesta del Ejecutivo “pero no tuvimos devoluciones”.

En tanto un desarrollador, Gabriel Pérez, cuestionó que “las unidades funcionales sean de 250 metros cuadrados, serán muy caras e imposibles de comercializar”.

El edil Martín Rosúa, de la Unión Cívica Radical/Juntos por el Cambio, requirió la necesidad de que “se contemplen todos los intereses con criterio objetivo y racional”.

Por su parte la edila Verónica Irizar, del bloque Socialista, coincidió con el pedido de Rosúa,y sostuvo que “hay que generar una normativa para evitar que los rosarinos se vayan a Funes y Roldán”, con las consecuencias de ello, por ejemplo en el tema transporte.

La concejala Gigliani consultó con relación a grandes parcelas y precisó la arquitecta González Cid que “mayores a 5.000 metros cuadrados podría ir como plan de detalle”.

En tanto el edil Juan Monteverde, de Ciudad Futura, preguntó acerca del “mecanismo de capatación de plusvalía”. Indicó al respecto González Cid, que “sería como en el resto de la ciudad”.

La comisión resolvió pasar a cuarto intermedio para seguir tratando la normativa sobre Fisherton, para el próximo miércoles 16 de noviembre, a las 9.

Asistentes

Junto a la presidenta de la comisión de Planeamiento, Nadia Amalevi, de Arriba Rosario, participaron María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular; Silvana Teisa, de Todos Hacemos Rosario; Juan Monteverde, de Ciudad Futura; Verónica Irizar, del bloque Socialista; Alejandro Rosselló y Ana Laura Martínez, de Unión Pro/Juntos por el Cambio, y Martín Rosúa, de la Unión Cívica Radical/Juntos por el Cambio.

En tanto acompañaron  a la secretaria de Planeamiento, Agustina González Cid; el subsecretario de la cartera, Gervasio Solari y la directora general de Planificación Urbana, Laura Del Teglia y la subdirectora, Leticia Leonhardt.

Reunión de la comisión de Seguridad

En una de las salas del Anexo “Alfredo Palacios”, por su parte, se realizó la reunión semanal de la comisión de Control, Convivencia y Seguridad Ciudadana, presidida por su titular, Lisandro Cavatorta, de Todos Hacemos Rosario.

Los ediles y las concejalas analizaron diversos expedientes que como resolución se transformarán en pedidos al Ministerio de Seguridad provincial, a partir de reclamos en distintas zonas.

En tanto se acordó que pasado mañana, miércoles 16, a las 19, los integrantes de la comisión se reunirán con la Vecinal Echesortu, en la sede de la misma, en la cortada Marcos Paz 4430.

De la reunión participaron junto a su presidente, Lisandro Cavatorta, de Todos Hacemos Rosario; Marcelo Megna, de la Unión Cívica Radical; Valeria Schvartz, de Volver a Rosario, y Jesica Pellegrini, de Ciudad Futura.